Cuenta con un total de 13 parques municipales y 9 espacios con zonas ajardinadas de relevancia además del Parque Natural de Serra Gelada.

De todos sus espacios verdes (después del parque natural) destaca por su dimensión y composición de especies vegetales, el Bulevar de los Músicos, cuyo proyecto se realizó a lo largo del tramo final de un cauce seco que discurre hacia la playa del Albir y cuya intervención afecta a ambos márgenes, fácilmente transitables a través de un itinerario de 700 metros.

Asimismo, el municipio cuenta con un extenso catálogo de árboles singulares de interés local, con un total de 42 ejemplares, formado por olivos, algarrobos, pinos piñoneros y carrascos, olmos y araucarias, ombús, palmeras datileras, de los que destaca el algarrobo de Foia Brell, considerado el árbol de esta especie de mayor porte de la Comunidad Valenciana, con una edad estimada de 800 años.

En cuanto a especies arbustivas y herbáceas ornamentales, son representativas las plantas autóctonas como el durillo, palmito, adelfas, lavanda, romero y otras exóticas como hibiscus, lantana, agapanthus, dimorfotecas, euriops, ficus benjamina, etc.

Es importante destacar la política de reforestaciones llevadas a cabo como medida de lucha contra el cambio climático mediante el uso de los vegetales como sumideros de carbono, por lo que en este sentido se han reforestado cerca de 80.000 m² de ejemplares adultos.

En relación a la conservación de las masas arbóreas, el ayuntamiento controla la tala de determinados ejemplares arbóreos por parte de particulares, obligando por medio de ordenanzas a la compensación de los mismos, mediante la plantación de nuevos ejemplares y  en el contrato de jardinería se contempla que todos los residuos vegetales generados del mantenimiento y podas, sean debidamente triturados y reutilizados mediante técnicas de compostaje.

En el “CEIP Los Carrascos”, centro medioambiental y paisajístico reconocido con el distintivo de calidad medioambiental Centro Azul, han iniciado un plan de recuperación y conservación de especies endémicas en peligro de extinción y en concreto de la especie Silene d’Ifach (Silene hifacenses)

L’Alfàs del Pi ofrece una gran dotación de zonas verdes ajardinadas y reforestadas en buen estado de conservación y el reconocimiento de estas acciones por parte de instituciones y de programas como Viles en Flor contribuye a su conocimiento y conservación.